Egon Ledec

Egon Ledeč nació en Kostelec nad Orlicí (Bohemia) el 16 de marzo de 1889. En 1900 comenzó a estudiar violín en el Conservatorio de Praga. A los 19 años tocó en el Concierto para Violín Sibelius con la Orquesta Filarmónica Checa y se unió a la orquesta ese mismo año. Además de tocar allí, se presentó con conjuntos de cámara y estudió en la Escuela del Conservatorio de Praga con los profesores Otakar Sevčík y Karel Hoffmann. Después de un período en el ejército checo, durante la Primera Guerra Mundial, Ledeč volvió a la Orquesta Filarmónica Checa y en 1927 fue designado segundo concertino. Participó en varias giras de conciertos, incluyendo giras por Londres, París, Suiza, Yugoslavia, Hungría, Italia, Irlanda y Bélgica.

Además de tocar en la Orquesta Filarmónica Checa, Ledeč se desempeñó como solista y músico de cámara. También compuso piezas semi clásicas, valses, marchas y composiciones breves para violín y para piano. Las obras para violín y piano están escritas con estilo de salón, reminiscencia de Fritz Kreisler. Entre sus obras se encuentran: Tatínkova melodie, Kytička, Serenade y Uklobevka. Su monólogo musical, Svítaní (Amanecer), para orquestas sinfónicas fue compuesto después de 1935 y fue adaptado a la letra Eternal Soldier de Frána Šrámek.

Luego de la invasión nazi del 15 de marzo de 1939 y del subsiguiente decreto que establecía que los judíos debían ser removidos de sus empleos, Ledeč perdió su puesto como segundo concertino de la Orquesta Filarmónica Checa. Previo a esto, mientras estaba de gira con la Orquesta Filarmónica, le escribió a la esposa del director de una escuela secundaria de Hradec Králové:

Quería advertirle con anticipación. Estaré sentado en la última fila de asientos de los primeros violines (para que no se sorprenda), pero creo que éste es un hecho temporario y se resolverá pronto. Ya hice algo para cambiar esto. Se lo explicaré más adelante.

El 27 de octubre de 1941, casi dos meses antes de que Ledeč fuera trasladado a Theresienstadt, le escribió a su hermana Olga sobre su inminente matrimonio con Anna Friedmannová y sobre su ansiedad con relación al futuro:

Por supuesto, sucedieron muchas cosas desde febrero y ni vos ni yo tenemos tiempo para escribir todo en una carta. Nos casamos el sábado (cosa que ya sabes por mis cartas). Espero que no nos inscriban [para ser trasladados] antes, así podemos seguir adelante con la ceremonia.

El 23 de noviembre de 1941 le escribió a Olga:

Gracias por tus cálidas palabras con relación a mi violín; sólo espero poder llevarlo conmigo. Hemos sido convocados y debemos presentarnos mañana en el ayuntamiento. Lo más probable es que tengamos que prepararnos para una salida rápida. Posiblemente a Theresienstadt o bien a Polonia, aunque nadie habla de Polonia estos días. Espero encontrar a amigos de Praga allí; amigos que ya hayan partido. Mi padre solía decir "Geld verloren, nichts verloren; Kopf verloren, alles verloren" [perder dinero no es perder nada, pero perder la cabeza es perderlo todo]... Con cariño, tu hermano Egon.

Ledeč subió al transporte L-178 de Praga hacia Theresienstadt el 10 de diciembre de 1941. Cuando llegó allí se unió a las primeras actividades musicales clandestinas y "para Navidad de ese mismo año (1941), Egon Ledeč logró paliar el sufrimiento de sus hermanos con los sonidos relajantes de su violín". Según Joža Karas, Ledeč se convirtió en el primer músico invitado por el Consejo Judío para tocar en veladas musicales. Ledeč, el Dr. Ilona Král, el violista Viktor Kohn y el Dr. Klapp formaron el primer cuarteto de cuerdas de Theresienstadt, “El cuarteto de los doctores". Estos músicos ya habían tocado juntos en Praga, donde a menudo interpretaban a la primera lectura para los invitados. En Theresienstadt, el cuarteto se reunía semanalmente para tocar obras de Haydn, Beethoven y Dvořak.

Ledeč pronto formó el Cuarteto Ledeč, conformado por Viktor Kohn como violinista, un aficionado llamado Schneider como segundo violinista, su hermano Paul Kohn como violonchelista y donde él era el primer violinista. Cuando Julius Stwertka del Cuarteto Rosé llegó de Viena, reemplazó a Schneider en la banda. El Cuarteto Ledeč tocó en la barraca Magdeburg. Con el establecimiento de la Freizeitgestaltung (División para la recreación) durante el otoño de 1942 y la aprobación de los nazis para realizar actividades musicales, el cuarteto comenzó a tocar para públicos diferentes.

En el verano de 1944 Ledeč creó un nuevo cuarteto con Adolf Kraus como segundo violinista, Viktor Kohn como violista y Robert Dauber como violonchelista. En su primer concierto tocaron un cuarteto de cuerdas de Haydn, Divertimento Ebraico de Siegmund Schul y Quartet en Re menor de Borodin. Viktor Ullmann escribió lo siguiente sobre esta interpretación:

Finalmente dediquemos un minuto al nuevo cuarteto de Ledeč, que nos brindó un Haydn delicado, fascinante y bello, y que además fue interpretado maravillosamente. A continuación disfrutamos de Divertimento Ebraico de Zikmund Schul (que ya conocemos). Fue interesante y sonó muy bien. Por último nos ofreció un cuarteto enérgico de Borodin pero no siempre con mucho valor. El nuevo cuarteto toca de manera precisa, culta y con un tono hermoso. Nuestra música de cámara es mucho mejor gracias a Ledeč.

Además de la música de cámara, Ledeč con frecuencia tocaba como solista. Muchas veces lo hacía en el patio con el acompañamiento de un acordeón. Paul Kling, violinista de Theresienstadt, también lo recuerda. Dijo de Ledeč:

…Yo solía ir cuando él y un acordeonista tocaban en los patios, o lo que se llamaría el área común de las barracas... con Lederer. Tocaba en los patios. Yo iba y lo escuchaba.

Era una situación trágica. El hombre que había estado en el foco de atención por décadas ahora iba a los patios traseros para dar algunos conciertos con el acordeonista Wolfi Lederer. ¡Un aristocrático de Praga tocaba música popular!

El 5 de julio de 1943 Alice Hertz Sommer llegó a Theresienstadt en el último transporte de Praga. En Theresienstadt, interpretó con Ledeč sonatas para violín de Beethoven. Ullmann describió esas interpretaciones:

Ledeč y Alice Herz-Sommer tocaron tres de las más bellas sonatas para violín de Beethoven... Egon Ledeč es más que un excelente ‘músico bohemio’ que creció con su instrumento. Es un artista que crea a conciencia y con un maravilloso sentido del estilo. Sabe de fraseo, de los secretos del violín, de sus golpes y sus técnicas, etc. Su tono bello ahora es purificado de todo desperdicio. Su estilo intenso y su instinto de músico son dignos de elogio.

En la película de propaganda nazi, “Theresienstadt: un documental del asentamiento judío”, Ledeč fue filmado como el concertino de la orquesta de Karel Ančerl.

Egon Ledeč fue trasladado a Auschwitz el 16 de octubre de 1944. Su nombre está en la misma lista de traslados de Gideon Klein, Viktor Ullmann, Rafael Schächter y Franz Eugen Klein. A su llegada a Auschwitz, Ledeč, Klein, Ullmann y Schächter fueron enviados inmediatamente a la cámara de gas.

Referencias

Joža Karas, Music in Terezín 1941-1945 (New York: Beaufort Book Publishers, in association with Pendragon  Press, 1985).

Paul Kling, interview by author, 2 September 2002, Vancouver, Canada.

Paul Kling, interview by David Bloch, 12 October 1989, Victoria, British Columbia.

Egon Ledeč, to Jitka Beranová, 19 May 1938, transcript at the Jewish Museum, Holocaust Archive, Prague, transl. Victoria Monjo and Kateřina Knappová.

Egon Ledeč, to Olga (Olinka) Šarfeubergerová, 27 October 1941, transcript at the Jewish Museum, Holocaust Archive, Prague, transl. Victoria Monjo.

Egon Ledeč, to Olga Šarfeubergerová, 23 November 1941, transcript at the Jewish Museum, Holocaust Archive, Prague, transl. Victoria Monjo.  

Egon Ledeč, “Curriculum Vitae, 1942, transcript at the Jewish Museum, Holocaust Archive, Prague, transl. Victoria Monjo. 

Jan Ledeč, “Egon Ledeč,” transl. Mr. Hattersley, from Silenced Tones: The Life and Work of the Czech Jewish Composers Gideon Klein and Egon Ledeč Exhibition (Prague: Jewish Museum, 2003).

Viktor Ullmann, 26 Kritiken Über Musikalische Veranstaltungen In Theresienstadt.  Edited by Ingo Schultz.  Hamburg: von Bockel, 1993.  Transl. Timothy McFarland.